28 de octubre de 2011

Etología del MASTIFF

MASTIFF


Es sin lugar a dudas una de las razas inglesas mas potentes. Fiero, de aspecto noble, es un óptimo perro de guarda que sabe defender a su amo con firmeza y valentía en el momento adecuado. De constitución robusta puede alcanzar a los 80 cm. de alzada a la cruz, con un peso que llega y, a veces supera, los 80 kg. Es por lo tanto un perro que se adapta mal a las casas actuales porque tiene necesidad de grandes espacios al aire libre donde poder moverse con libertad y desarrollar armónicamente su magnífica musculatura.

Esta raza es sin lugar a dudas una de las más antiguas ya que de ella provienen, muchas otras, de casi todo el mundo. El Mastiff desciende de los Molosos del Epiro, parientes directos del Mastín del Tibet, introducidos en las Islas Británicas por comerciantes y navegantes provenientes de Sidón y de Tiro. Desde el comienzo del siglo XVI conservaba su nombre primitivo de "Moloso inglés". Por su tamaño, su fuerza y su carácter, era utilizado como perro de guerra. De él desciende también el antiguo "Perro de Sangre" utilizado por los españoles en la conquista de América. En 1800 los ingleses lo introdujeron en América del Norte, donde rápidamente adquirió un cierto prestigio por su fuerza y valor. Terminada su utilización para fines bélicos, comenzó para esta raza una lenta decadencia. En lugar suyo, se prefería el menos voluminoso Bullmastiff más ágil y tal vez más feroz como guardián. Sin embargo, ingleses y americanos han continuado la cría de este perro que logró, en ambos continentes, notables éxitos debidos también a su carácter que se ha modificado sustancialmente en los últimos tiempos, convirtiéndose en mucho más dócil y equilibrado.

Perro de gran tamaño, pesado, compacto y voluminoso. Cabeza ancha, cuadrada y compacta con una serie de pliegues pocos marcados. Orejas relativamente pequeñas, finas, adheridas al cráneo y de inserción muy ancha. Ojos bastante oscuros y medianamente distanciados entre sí. Hocico corto (1/3 de la longitud de la cabeza) potente y con stop muy marcado. Mandíbula ancha, dentadura muy robusta con cierre a tenaza y a veces con un ligero prognatismo. La máscara debe ser bien negra y brillante y superar en poco la línea de los ojos. Cuerpo fuerte y potente con tórax muy desarrollado en profundidad y en ancho. El tronco es más largo que la alzada a la cruz, sin embargo, debe tener la línea superior muy sólida y la base de la cola alta. Extremidades anteriores anchas entre sí, musculosas, con osamenta potente y bien verticales. Pies compactos con dedos cerrados y arqueados. Parte posterior sólida y musculosa. Piel ligeramente floja sobre todo el cuerpo. Capa con pelo liso y bastante duro al tacto. Colores: albaricoque, leonado claro, leonado dorado, atigrado, siempre acompañado de una máscara bien definida y marcada.


Altura y peso. Alzada a la cruz de 70 a 80 cm. y peso comprendido entre los 75 y 80 kg.

Cabeza. Trufa ancha, negra con fosas ligeramente salientes. Labios divergentes en ángulo obtuso, ligeramente colgantes. Hocico corto, ancho bajo los ojos, con las caras laterales casi paralelas hasta la punta de la nariz. Dentadura en tenaza a veces con un ligero prognatismo. Stop bien marcado pero no brusco. Cráneo ancho entre las orejas, plano pero con pliegues, cuando el perro está atento. Arcos superciliares ligeramente levantados, depresión central en la frente. Músculos de las sienes y de las mejillas muy desarrollados.

Ojos. Pequeños, alejados, de color avellana muy oscuro.

Orejas. Pequeñas, suaves al tacto, distanciadas y de inserción muy alta a los lados del cráneo. En reposo, cuelgan
planas y apretadas contra las mejillas.

Cuello. Poco arqueado, de longitud mediana, musculoso.

Extremidades anteriores. Hombros y brazos ligeramente oblicuos, pesado y musculosos. Extremidades rectas, bien distanciadas entre sí, codos pegados al pecho, corvejones verticales.

Cuerpo. Tórax ancho, profundo y generoso. Costillas arqueadas y redondeadas, falsas costillas profundas e inclinadas hacia los muslos. Circunferencia del tórax superior en un tercio a la alzada a la cruz. Dorso y lomos anchos y musculosos, ligeramente arqueados. Costados muy profundos.

Extremidades posteriores. Anchas y musculosas, con muslos bien desarrollados. Metatarsos ligeramente arqueados, separados entre sí, sólidamente emplazados.

Pies. Anchos y redondos, con dedos bien arqueados y uñas negras.

Cola. De inserción alta llega un poco más allá del corvejón. Ancha en la raíz se afina hacia el extremo. En reposo cuelga recta, pero cuando el perro está excitado, forma una curva con la punta hacia arriba.

Pelaje. Corto y denso, no demasiado fino sobre los hombros, sobre el cuello y sobre el dorso. Color: albaricoque, gris-leonado, entrecano o leonado oscuro. Nariz negra como también los bordes de los párpados.

ALIMENTACION. También esta raza tiene exigencias alimenticias muy altas: de las 2.500 a las 2.700 kcal. diarias, como ración de mantenimiento. Grandes son las necesidades en minerales y vitaminas del Mastiff que a veces inducen al propietario a aplicarle una sobredosis con consecuencias que, en ocasiones, pueden ser graves. En efecto, en el cachorro, un exceso de calcio puede provocar anomalías en el desarrollo, cojeras y problemas articulares.

CUIDADOS DIARIOS. Para el cuidado de la capa es aconsejable el empleo de un guante para pelo liso o a falta de él, de un cepillo blando.

CON EL VETERINARIO. Un suministro demasiado abundante de vitaminas A y D puede ser la causa de un escaso apetito, dolores en las articulaciones, fragilidad de los cartílagos, diarreas hemorrágicas. A veces también puede producirse una calcificación de la estructura pulmonar, renal, y de la mucosa gástrica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario