30 de julio de 2012

Niños y perros "evitar agresiones"

Niños y perros "evitar agresiones"


Muchísima gente tiene perros y niños a la vez, y aunque la mayoría se llevan bien, eso no quiere decir no puedan ser protagonistas de algún percance. En muchas ocasiones he visto perros agresivos, y no siempre tiene que ver la dominancia con ello, muchas veces el problema de agresividad es por miedo y ésta es una de las formas más peligrosas que hay para un niño, estamos acostumbrados a pensar que los perros tiene paciencia infinita con los niños y muchas veces nos sorprenden con que nuestro querido amiguito les ha mordido con graves consecuencias De la misma forma un perro al que los niños molesten puede sentirse agredido y morder a estos sólo para evitar que le hagan daño. Por otro lado está el perro dominante que cualquier intento de un niño de acercarse a su lugar de descanso o a su comida podría dar paso a una agresión por parte del perro.

Ante todo hemos de tener en cuenta que los perros son de una especie totalmente diferente a nosotros y tienen otra manera de ver el mundo. ¿Para que utilizan los perros la agresividad?

Supervivencia Sé que con esta palabra no saco de dudas a nadie, pero…
¿Qué significa supervivencia para un perro?

 - alimentación
 - evitar ser depredados
 - reproducción
 - territorio

 ¿cuándo puede ser un perro agresivo hacia un niño?

 - a la hora de comer, o cuando está en posesión de un hueso de roer o similar
 - cuando cree que va a ser agredido
 - en presencia de cachorros o hembra en celo
 - para proteger su territorio

 En definitiva, un perro puede llegar a ser muy peligroso con un niño, independientemente de su raza y por ello vamos a analizar estos 4 puntos.

 Alimentación ¿Cuántas veces hemos presenciado a un perro gruñendo ante su plato de comida? Es necesario enseñar a un perro que no pasa nada si se le toca la comida, hay que acostumbrar al perro poco a poco y con refuerzos positivos a que retirarles, tocarles o merodear por su comida no significa que se la vayamos a quitar. Si cada vez que merodeamos por su lado le regalamos un premio....pronto estará deseando que lo hagamos, así pues debemos dejar de " te quito la comida por que sí " para acostumbrarlos de forma agradable a que quitarles la comida es siempre mas agradable que la comida.

 Evitar ser depredados Es otra forma en la que nuestro fiel amigo se puede tornar una amenaza, si cree que va a ser agredido (de la manera que sea) puede responder con agresividad, así pues si un niño hace gestos y/o arremete un golpe al perro, aunque sea jugando, el perro puede volverse en su contra, pensemos que los niños a veces pueden ser crueles con nuestras mascotas, y esto debe ser evitado.

Reproducción
Éste quizás sea motivo menos frecuente de agresión a niños, pero desde luego hay que tenerlo en cuenta ¿Por qué digo menos frecuente?, pues por que normalmente la gente tiende a tener un perro, no varias parejas. Para que un perro sea agresivo con un niño por reproducción, sólo es necesaria una hembra en celo, cualquier macho se puede volver violento para acceder y/o proteger de otros machos a dicha hembra, asimismo cualquier hembra que tenga cachorros se puede volver muy agresiva para defender de posibles amenazas a sus cachorros.

Territorio
Para un perro un territorio puede ser desde su manta, hasta varios kilómetros, así que deberemos tener presente que el perro pueda lesionar a cualquier niño si invade su terreno, aquí es de suma importancia que perro y niño aprendan a tratarse el uno al otro. Así pues es muy importante el tener muy bien socializado y educado al perro, lo cual se consigue con facilidad si lo adquirimos de cachorro y acudimos a un profesional el cuál nos dará las pautas necesarias para evitar al máximo la agresividad y al mismo tiempo educar al niño de forma que vea al perro como un ser vivo, no como un juguete.

 De todas formas, tengamos o no un perro bien educado, no deberemos dejar JAMÁS a un niño y a un perro solos sin supervisión. 
 
Fuente: facilisimo.com

26 de julio de 2012

La sociopatía de los lanceros de Tordesillas

La sociopatía de los lanceros de Tordesillas


El ojo de un lancero de Tordesillas y el mío obedecen a idénticos principios anatómicos. Él y yo vemos exactamente lo mismo al contemplar a un toro derrotado y vencido por el agotamiento y el dolor. Los dos entendemos que en tales instantes angustiosos, el animal busca inútilmente llenar sus pulmones con un oxígeno que a esas alturas ya tiñe de rojo la tierra sobre la que se derrama su sangre. Uno y otro somos conscientes de su espantosa agonía provocada por las lanzadas. Y ambos sabemos que ese toro morirá.
Pero en su caso, una estampa tan sobrecogedora le resulta fascinante, seductora, mientras que a mí lo que logra es estremecerme. Y no estamos hablando de
una película o de un cuadro, en los que el horror que puedan transmitir se circunscribe al mundo de la imaginación, sino de la realidad encarnada en el padecimiento atroz y visible de un ser vivo. Con esas premisas, ¿dónde reside la diferencia entre su reacción y la mía ante semejante espectáculo?
Según la psiquiatría, la sociopatía o el trastorno de la personalidad antisocial es un patrón general de desprecio y violación de los derechos de los demás. Una de sus características es la ausencia de empatía o de remordimientos, así como una constante búsqueda de nuevas sensaciones que pueden llegar a extremos aberrantes. También incluye el experimentar la necesidad de demostrar control y poder. No soy ningún profesional médico, pero aún sin formación específica alcanzo a observar todas estas características en un lancero.
En cuanto a las causas se mencionan las genéticas, las biológicas y también el entorno de la persona. Parece que la cercanía física del Torneo del Toro de la Vega y que constituya un referente para ciertos padres, educadores, vecinos o amigos del futuro lancero, algo puede influir en la consolidación de esas fuentes ambientales. Según el Jefe de Psiquiatría del Hospital de Alcorcón, Francisco Montañés, aproximadamente la mitad de los individuos asociales incurren en conductas sádicas, y la Revista Journalof the American Academy of Psychiatry and the Law publicó un estudio en el que se asociaban los actos de crueldad con los animales, con un trastorno de personalidad antisocial. Más allá son infinidad de estudios los que relacionan maltrato de animales, violencia contra personas y conductas antisociales. Para quien desee ahondar en estos aspectos contamos en España con una persona que alberga conocimientos enciclopédicos sobre los mismos, la Doctora Nuria Querol I Viñas.
En el desarrollo de los datos citados, se mueve probablemente la explicación al porqué de esa interpretación tan diferente a una misma realidad entre un lancero y yo, o entre ese lancero y la mayoría de los ciudadanos de este País o de cualquier otro, a los que les resulta muy difícil de asumir que el Toro Alanceado de Tordesillas sea un acto todavía permitido por las autoridades.
Ahora falta saber si con todo el nivel de información del que disponemos, nuestros políticos adaptan su gestión de gobierno en este asunto a la opinión y a los informes de psiquiatras y criminólogos, o prefieren ajustarla al contenido y a las creencias de los responsables del Patronato del Toro de la Vega , una suerte de Congregación del Santo Oficio donde los extravíos y la perversión son carta de identidad para sus responsables y seguidores.
De momento, un toro llamado Volante, espera en una ganadería a que llegue el segundo martes de septiembre, jornada en la que un grupo de hombres, a mi entender sociópatas, lo acribillarán a lanzadas y probablemente lo rematarán con el primer objeto punzante que tengan a mano. Ese animal no entiende de política, medicina o criminología, pero al final va a ser él quien pague con su muerte o se beneficie con la continuidad de su vida, de la decisión que tomen los únicos que pueden convertir la razón en ley o continuar como hasta ahora: sometidos a la degradación dictada por quienes padecen patologías tipificadas y muy nocivas para animales y humanos, niños especialmente.
Sólo un apunte más: el alanceamiento de Tordesillas constituye una excepción a la prohibición de maltratar y ensañarse con animales, toros incluidos, fuera de la fecha y del lugar autorizado. Con eso basta para demostrar que hasta quienes redactan las leyes entienden que es un acto brutal que merece la prohibición. Dar el visto bueno a su celebración un día específico como salvedad a la norma, es equivalente a permitir el linchamiento puntual de un hombre como parte de un programa de festejos.
 
Fuente: http://findelmaltratoanimal.blogspot.com.es/2012/07/la-sociopatia-de-los-lanceros-de.html

25 de julio de 2012

El miedo en los perros (tipos de temores y cómo tratarlos)

El miedo en los perros (tipos de temores y cómo tratarlos)

Los problemas de miedo, en la práctica, pueden dividirse en dos grandes categorías, según la naturaleza del estímulo que asusta al perro. La primera corresponde al denominado miedo social, es decir, a las personas o a otros perros. En la segunda, se incluyen las fobias a estímulos inanimados, como petardos, truenos o vehículos. A continuación, comentamos brevemente los dos problemas más frecuentes.
Miedo social (a personas u otros perros)
Los perros muestran miedo a las personas o a otros perros por dos motivos: un problema de socialización o una experiencia traumática.
Si un perro no mantiene contacto con el ser humano durante el período de socialización, podrá mostrar en el futuro un miedo intenso hacia las personas.
Un perro bien socializado que sufra una experiencia desagradable con una persona puede, a partir de ese momento, rechazar el contacto, no sólo con esa persona, sino con cualquier otra que se le acerque.
En ocasiones, pensamos que un problema de miedo se debe a que el perro ha sido maltratado de algún modo por una persona. Aunque esta explicación pueda ser a veces cierta, nunca debemos descartar la posibilidad de que el problema se deba a una falta de contacto, es decir, a un déficit de socialización.
Miedo a petardos y a truenos
Se trata probablemente de la fobia más frecuente del perro. Suele aparecer durante los primeros años de vida y empeora año tras año.
Las reacciones de los perros varían en intensidad, desde una ligera intranquilidad a una auténtica reacción de pánico, que incluye temblores, jadeo y gemidos intensos.
Los perros más sensibilizados pueden aprender a reaccionar con miedo a señales que anticipan la llegada de los petardos o de la tormenta. Un ejemplo curioso es el de algunos perros con fobia a los petardos, que demuestran las primeras señales de intranquilidad cuando sus propietarios empiezan a ver un partido de fútbol en la televisión.
¿Qué hacer?
Los problemas de miedo deben ser siempre evaluados y tratados. Además de resultar molestos, son indicativo de una falta de bienestar en el perro.
¿Cómo actuar ante un ataque de pánico?
a) Miedo social (a personas o a otros perros).
El tratamiento más moderno se basa en un sistema de adiestramiento denominado desensibilización. Se trata de exponer al perro de forma gradual al estímulo que le provoca miedo, es decir, a una persona o a otro perro. Para acelerar el proceso, se recompensa al perro con caricias, juego o comida si se muestra tranquilo.
La aplicación de este tipto de terapias no es sencilla y debe estar supervisada por un veterinario o por un educador canino.
En ningún caso deben utilizarse sistemas basados en el castigo para corregir problemas de miedo a personas o a otros perros.
b) Miedo a petardos y a truenos.
Existen dos estrategias frente a un problema de fobia a petardos y a truenos:
• Terapias curativas: Su objetivo es erradicar la respuesta de miedo, es decir, que el perro deje de asustarse de los petardos o los truenos. Para conseguirlo se aplican técnicas de desensibilizacíón en las que se utilizan grabaciones de petardos y truenos. Se trata de tratamientos complicados, que deben ser supervisados por un veterinario o un educador canino. Además, su eficacia es muy variable y en muchas ocasiones pueden aparecer recaídas.
• Terapias paliativas: Su objetivo no es eliminar el miedo, pero si controlar su intensidad cuando aparece. La base del tratamiento es la administración de medicación ansiolítica, en el momento o, mejor aún, algo antes de que aparezca el estímulo que asusta al perro. La administración de este tipo de fármacos debe realizarse siempre bajo estrecho control veterinario.
Además de la medicación, podemos seguir unos consejos generales para ayudar al perro a controlar su miedo. Ante un ataque de pánico actuaremos de la siguiente forma:
1. No acariciarlo si muestra miedo. Ante una reacción de miedo es muy importante no intentar calmar al perro. Aunque en ese momento su comportamiento pueda apaciguarse, el efecto a largo plazo será el de potenciar todavía más su miedo.
2. Acariciarlo si no muestra miedo. Si al cabo de un rato deja de mostrarse nervioso, pueden aprovecharse esos momentos para acariciarlo.
3. Permitir la retirada. Cuando están asustados, muchos perros buscan refugio, por ejemplo, debajo de una cama o detrás de un sofá. La mejor forma de proceder en tal situación es dejar que el perro permanezca allí, ya que es donde probablemente se siente más seguro. No debemos por lo tanto forzar al perro a salir de su escondite.

20 de julio de 2012

Descubierto fósil de perro domesticado de 31.700 años de antigüedad

Descubierto fósil de perro domesticado de 31.700 años de antigüedad

Siempre se ha pensado que para domesticar una planta o un animal es necesario comprender sus ciclos vitales y su naturaleza, para lo que sería conveniente transcurrir con ellos un período relativamente largo de tiempo. Es esto, en parte, lo que articula varias teorías sobre la neolitización y el paso de una economía depredadora a una productiva. Según estas hipótesis, el hombre tuvo que convivir durante un largo período de tiempo y en estrecha proximidad con ciertas especies. Así, comprendió sus ciclos, sus necesidades y sus posibilidades alimenticias. Y de este modo, se atrevió a manipularlos y finalmente terminó controlándolos.
Los indicios arqueológicos nos hacían suponer que las primeras especies domesticadas en Próximo Oriente y Europa fueron el trigo y el cerdo (alrededor del 8.000 AC en Asia Proximoriental y algo más tarde en nuestro continente). Sin embargo, un reciente descubrimiento en Bélgica le ha dado un revolcón a este supuesto.
En la cueva de Goyet, a unos 70 kilómetros al SE de Bruselas, se descubrió en Octubre de 2008 la evidencia más antigua de domesticación: un perro de 31.700 años, asociado a los estratos del Auriñaciense, en una de las últimas glaciaciones del Würmiense.
Hasta ahora, las pruebas obligaban a los prehistoriadores a fechar la domesticación del perro a finales del Paleolítico Superior. Hace algún tiempo, se descubrieron en Eliseevich (Rusia) restos de can con indicios de domesticación y se fecharon alrededor del 14.000 AC. Esto ya hacía suponer que la domesticación del perro fue más antigua de lo que sospechábamos. Pero una cronología de 32.000 AP era demasiado para cualquier expectativa.
Según Mietje Germonpré, paleontólogo del Instituto Real de Bélgica de Ciencias Naturales, «la forma de los perros paleolíticos es similar a la de los actuales Husky, acaso con unos dientes de mayor tamaño, y una corpulencia más evidente. Tal vez, en ese aspecto, sean más parecidos a los perros pastores de nuestros días. Tenía hocico más corto y un casquete cerebral relativamente más grande que otros perros fósiles y lobos».
El fósil está siendo analizado, pero ya han salido a la luz algunos datos de los resultados. Al parecer, a través de unas pruebas de isótopos se ha podido comprobar en qué consistió la alimentación del perro: caballos (Equus mosbachensis), renos (Rangifer tarandus) y bueyes almizcleros (Ovibos moschatus).
El propio Germonpré ha desarrollado una teoría sobre la posible domesticación del perro. Afirma que fue resultado de la compasión. Seguramente, propone, los cazadores recolectores paleolíticos matasen en más de una ocasión lobos adultos y decidiesen quedarse con los cachorros, en vez de abandonarlos. Con el tiempo irían desechando a los canes más agresivos y manteniendo a los más dóciles. Tras todo lo cual, transcurridas diez o doce generaciones, se habrían producido los cambios morfológicos que se observan en el Perro de Goyet y que podemos considerar como resultado de una domesticación.
Surgen varios problemas. Si la domesticación del perro se produjo efectivamente en este momento, ¿por qué no se han encontrado más fósiles de canes domesticados hasta el 14.000 AC? Susan Crockford, antropóloga de la Universidad de Victoria (Canadá) sostiene que el hombre no domesticó al lobo, sino que el lobo sufrió una “auto-domesticación” cada cierto tiempo en la historia, que por supuesto fue aprovechada por el hombre. Esto explicaría la intermitencia de fósiles de perro domesticado en el registro fósil. Pero a la mayoría de biólogos evolutivos les parece poco verosímil este proceso. Más aún teniendo en cuenta que los hombres que domesticaron al lobo (o aprovecharon la “auto-domesticación”) no desaparecieron ni dejaron de llevar a cabo esta práctica. Alguien ha sugerido que la escasez de fósiles de perros domesticados pueda deberse, o bien a que los humanos los aprovechaban una vez muertos, o bien a que la muerte de los canes se produciría habitualmente en acciones de caza, lejos de los asentamientos principales de los hombres paleolíticos.
Sea como fuere, este descubrimiento pone en entredicho varias ideas que se tenían en torno a la domesticación de los animales. Antes que nada hay que aclarar que la domesticación no es sinónimo de ganadería. No parece probable pensar que la cría de canes tuviese fines alimentarios entre las sociedades cazadoras-recolectoras del paleolítico (aunque es cierto que más tarde sí lo tendría en ciertos focos de neolitización asiáticos y americanos). Pero la domesticación, en sí, implica una permanencia y manipulación relativamente larga por parte de los humanos hasta el punto en que se producen los cambio físicos que la evidencian.
Como decía antes, se pensaba que esta domesticación era el resultado de una evolución en la comprensión del hombre acerca de los ciclos de reproducción y crecimiento de los animales. La antigüedad de este hallazgo cuestiona dicha teoría. Si los hombres de finales del paleolítico medio ya pudieron domesticar el perro, significa que ya comprendían cuáles eran las bases de domesticación. ¿Por qué, entonces, tardaron veinte mil años en atreverse a llevar esta domesticación a otras especies? Si el hombre (sapiens) pudo domesticar sólo diez mil años después de su llegada a Europa, ¿por qué tardó más del doble de este tiempo en volver a domesticar a otros animales?
La principal perjudicada por el descubrimiento del Goyet es la teoría ideológica sobre el surgimiento del Neolítico. Teniendo en cuenta que la domesticación se produjo veinte mil años antes de la neolitización, es muy poco probable que las causas de ésta se debiesen a una evolución en el comportamiento humano. Por otra parte, las teorías climáticas tampoco salen bien paradas. No fue necesaria una convivencia larga y continuada entre los animales y el hombre para que se produjese la domesticación. Ni mucho menos un cambio climático tan importante como el Holoceno.
En fin, el perro de Goyet, no hace sino abrir más aún el tema de la domesticación y los orígenes del Neolítico. El por qué los hombres comenzaron a cultivar plantas y animales en un momento determinado de la historia, en distintos puntos y con tanta sincronía, continúa siendo un misterio.

Para leer la notica original:
http://neanderthalis.blogspot.com/,
http://dsc.discovery.com/news/2008/10/17/paleolithic-dog-skull.html

13 de julio de 2012

La forma correcta de acercarse a un perro extraño

La forma correcta de acercarse a un perro extraño
 
Cuando te acerques a un perro siempre pide permiso antes de tocarlo. Primero al dueño y luego al perro.
Una vez obtienes permiso, acércate lentamente al lado del perro y ofrécele tu mano para oler con la palma hacia abajo.
No hagas ningún movimiento rápido o abrupto. Háblale lentamente y en voz baja.
Espera a que el perro te dé el visto bueno.
Si quiere tu afecto, bajará su cabeza, relajará las orejas o incluso se acercará más a ti. Deja que el perro se acerque y la olfatee.
Puede ser que el perro te quiera oler otras partes de tu cuerpo ya que es de esta manera que ellos se saludan.
Acarícialo en la cabeza, en la espalda (sin llegar demasiado atrás). Evita tocar su estómago, cola, orejas o pies.
Si la cola y las orejas del perro están tiesos, su cuerpo tenso, su pelo parado de puntas y te gruñe y enseña los dientes, ten cuidado, el perro está enojado.
Si el perro está asustado, lleva sus orejas bajas, la cabeza colgando hacia abajo, el cuerpo está agachado y lleva la cola entre las piernas, ten cuidado, podría gruñir y morder.

11 de julio de 2012

Ideas para jugar con tu perro

Ideas para jugar con tu perro


A veces limitamos la interacción con nuestro perro a los clásicos paseos donde, si hay tiempo, corretea un rato con otros perros o le lanzamos la pelota 5 o 10 minutos. Aunque jugar con otros perros durante un rato también es importante, es el juego con nosotros el que es más divertido y estimulante para nuestro amigo.
Jugar todos los días con nuestro perro no sólo lo mantiene en forma y más feliz, también es una forma excelente de mejorar nuestra relación con él, de relajarnos nosotros mismos y el más efectivo método de aprendizaje para un perro. Cuando un perro juega, aprende a la vez que se divierte, libera estrés y pasa el resto del día mucho más tranquilo. En muchas ocasiones, los problemas de conducta en el perro se deben precisamente a la falta de juego. Aquí tienes algunos consejos para pasar más tiempo de calidad con tu amigo:

Aprendo jugando

El tiempo de juego es el mejor momento para enseñarle las conductas adecuadas a nuestro perro. Rodar con él por el suelo sin control puede ser muy divertido para ambos, pero le estamos enseñando que esa conducta está bien y tal vez luego no entienda por qué nos hemos enfadado cuando la repitió con esa ancianita que pasaba por el parque. O algo peor…
Por este motivo, reforzar las conductas positivas mientras jugamos nos ayudará también fuera del tiempo de juego. Conductas como el autocontrol (sentarse para que lancemos la pelota o que no nos salte encima cuando se emociona) y la obediencia (acudir a la llamada o devolver el juguete que lanzamos) mejorarán increíblemente la relación con nuestro perro.
No olvides que ante todo estáis jugando, es decir, nada de reñirle cuando hace algo que no te gusta. Has leído bien, reñir a nuestro perro no sólo no es bueno, es muy perjudicial.
  • En primer lugar, una riña entristece y frustra a nuestro perro, anulando así gran parte de los efectos beneficiosos que estábamos consiguiendo al jugar.
  • En segundo lugar, el estado de ánimo positivo y de total atención que habíamos conseguido (y que es lo que favorece el aprendizaje) se ha ido, ahora tenemos un perro a la defensiva y con miedo de hacer algo mal y recibir otra bronca.
  • Por último, prácticamente todas las veces que alguien riñe a su perro lo hace en el peor momento (mucho después, en tiempo “perruno”, del comportamiento negativo), por ejemplo: cuando se escapa y la bronca la recibe al volver, asociará que volver es malo para él.
La mejor y única forma ética de educar a nuestro perro es reforzar sus conductas positivas (usando un clicker, una palabra de aprobación o dándole un premio cuando hace lo que queremos) e ignorar las conductas negativas (no premiándolo e incluso ignorándolo unos minutos cuando se trata de un comportamiento lo suficientemente negativo).

Una pelota para gobernarlos a todos

A veces exageramos con la pelota o el Frisbee y no jugamos a otra cosa con nuestro perro. Aunque hay excepciones, los perros también se aburren de esa monotonía, e incluso si tu perro es de los que no se cansaría de traer la pelota todo el día, variar los tipos de juego le resultará emocionante y mantendrá su mente ágil. ¡Hay cientos de juegos que os haran pasar a los dos un rato genial!
  • ¡Busca chico, busca! Esconder juguetes o premios y enseñar a nuestro perro a buscarlos es una excelente forma de ayudarlo a desarrollar sus habilidades de rastreo (¡y de dejar con la boca abierta a conocidos y desconocidos!)
  • Tira y afloja. Con los juguetes de tira y afloja pasaréis un buen rato midiendo fuerzas. Recuerda que no es malo dejarlo ganar algunas veces, de hecho, si tiene poca seguridad en sí mismo deberías dejarlo ganar a menudo. Si no… ¡que gane el mejor!
  • Agility. ¿Conoces el Agility? Echa un vistazo a este vídeo. Alucinante ¿no?
  • Canicross. ¿Te gusta correr? Seguramente a tu perro también, átalo a ti con un arnés y poneos en forma juntos (asegúrate de no forzar a tu perro). Si tu amiguito es de los pequeños, puedes llevarlo en el bolsillo ;)
  • ¡Sit! ¡Platz! ¡Fus! Las órdenes también son un juego divertido para tu perro, y te sorprenderá lo rápido que las aprenden.
  • ¡A bailar! ¿Que si pueden bailar? ¡Claro que sí! Y son auténticos profesionales, mira este vídeo.
  • Be water, my friend. En la playa, en una pequeña piscina en tu jardín, con la manguera… Hay muchas formas de que tu perro y tú tengáis una experiencia refrescante y divertida.
  • Mushing. Para que tus perros tiren de un trineo no hace falta vivir en Alaska, ni que haya nieve y, con algo de imaginación, tampoco un trineo. Y a pesar de lo que digan las malas lenguas, ¡los Chihuahuas también pueden!
Te invitamos a que pruebes estos juegos con tu perro, no te arrepentirás. Recuerda que no son los únicos, hay cientos de juegos diferentes para elegir.

Solo en casa

A veces nuestro amigo tiene que quedarse solo en casa mientras estamos en el trabajo, o haciendo algún recado. Para esos momentos, existen muchos juguetes para perro que le ayudarán a combatir el aburrimiento y protegerán la integridad de nuestros muebles, zapatillas y cualquier objeto de nuestra casa no diseñado para ser mordido. Por ejemplo un Kong, que es un juguete hueco que rellenamos con su pienso o alguna golosina y mantiene a nuestro amigo entretenido durante horas sacando poco a poco el contenido.
Prueba con algunos juguetes y verás que al llegar a casa tu perro estará más relajado y feliz, y todo lo demás en su sitio :)


10 de julio de 2012

Piel Sensible en Perros

Piel Sensible en Perros

Todos hemos oído hablar mucho del sistema inmunitario de los seres vivos debido a la importancia que tiene en cuanto a la defensa contra los patógenos; sin embargo, la primera barrera protectora que posee el cuerpo es la piel y en el caso del perro supone un 12% de su peso corporal.
perro6 Piel Sensible en Perros
No obstante, también cumple otras funciones esenciales, ya que sirve como elemento sensorial al contar con las terminaciones nerviosas que informan al organismo sobre la temperatura, el dolor, el contacto, etc.; dispone de una película compuesta por sebo, principalmente, que asegura la flexibilidad de la piel, y, por último, ayuda a mantener las reservas de agua, grasa y vitaminas.
Precisamente por ser la primera barrera del organismo, es la primera que puede verse afectada por diversos trastornos, que si son menores sólo afectan al confort y no suponen una patología que requiera la intervención del veterinario.
A este respecto, algunos signos de trastornos menores de la piel son que esté seca, que aparezca enrojecida e irritada, que tenga más grasa de lo normal, que presente caspa y que haya picor o prurito. El hecho de que estos signos no puedan ser considerados una patología en sí misma no significa que carezcan de importancia, ya que pueden hacer que el perro se sienta muy incómodo.
En cuanto a sus causas, son muy variadas, ya que se pueden deber a ciertas carencias nutricionales (falta de ácidos grados, vitaminas o minerales), al entorno en el que vive el perro (climas secos, muy soleados o una peluquería inadecuada) y a sus propias circunstancias (estrés o que esté en celo).
Como ya hemos visto, la presencia de estos síntomas no significa que la piel padezca alguna patología; por ello, pueden verse muy mejorados con una alimentación adaptada a estas necesidades. En el caso de los alimentos Royal Canin Dermacomfort, contienen aceites de soja, de borraja y de pescado, así como semillas de lino y el complejo “Skin Barrier”, además de un número reducido de fuentes de proteínas de elevada disgestibilidad, con el fin de reducir al mínimo los posibles alérgenos.

Fuente: mundo-animal

8 de julio de 2012

El pan duro y los perros

El pan duro y los perros

perro comiendo pan El pan duro y los perros
En algún momento de nuestras vidas hemos dado un trozo de pan a nuestro perro, y a ellos les encanta que les demos ese trozo de corteza de pan, miga o incluso el trozo de pan mojado en salsa.
Pero, ¿Te has preguntado alguna vez sobre la influencia del pan en la dieta de tu perro?

¿Es El pan duro es un gran aliado para nuestros perros?

Puede parecer que el pan blando o crujiente del día es el mejor tipo de pan que les podemos dar a nuestros perros, pero contrariamente a lo que podamos pensar, el pan duro puede ser más beneficioso para ellos, por los siguientes motivos o formas de suministrárselo:

El pan como premio

Para todos aquellos perros a los que les encanta el pan, será una buena forma y muy natural de premiarles por una buena conducta, una buena forma de reforzar los comportamientos positivos de nuestro perro.

Como ayuda al entretenimiento

Está claro que al ser un trozo duro no lo podrán comer de una vez, lo que les supondrá un excelente entretenimiento y hasta un juego con el que puede estar hasta horas mordiendo y royendo el mismo, por ello seguro que estará más que encantado y entretenido.

Pan para limpiar la dentadura del perro

Quizá este sea el punto más importante que hay que destacar del uso del pan duro en los perros, precisamente que nos puede ayudar a limpiar sus dientes.
Si eres una persona cuidadosa con la higiene de tu perro, darles un cacho de pan duro de forma habitual, una vez a la semana aproximadamente, les ayudará a limpiar, pero hay que tener en cuenta que en ningún caso debe sustituir la higiene bucal de tu perro.

Precauciones a la hora de dar pan a nuestros perros

Al igual que nos pasa a nosotros, el pan aporta muchos hidratos de carbono, por lo que deberemos administrarlo procurando no darles pan cada día, sobre todo si tu perro tiene sobrepeso o tendencia a la obesidad.

6 de julio de 2012

Elegir camas para perros

Elegir camas para perros

camas para perros¿Tienes una mascota sea un perro o un gato? y ¿quieres comenzar a brindarle las mejores comodidades para su vida ? Si es así debes empezar absolutamente ofreciéndole una cama para perros o un cojín donde pueda dormir tranquilamente.
Muchas personas se conforman con dejarlos dormir en los muebles, en su propia cama o hasta en el piso con la excusa de que solo son animales y están acostumbrados a ello, pero si lo ponen a elegir donde dormir, claramente elegirá el lugar más cómodo los cuales indiscutiblemente poseen un cojín o una almohada.
Tenemos en cuenta de que existen perros y mascotas de todos los tamaños, estilos y gustos, hay que elegir correctamente la cama en función del tamaño, desde camas para perros pequeños o gatos hasta camas para perros grandes.
Las practicas anormales al dormir: la incomodidad al dormir, el constante movimiento o la simple escasees de ella es un síntoma de que algo no anda bien externa o interiormente, así que si nota alguna anomalía en el comportamiento de su mascota que se vea reflejada en otras actividades, como la alimentación, no dude en buscar ayuda profesional

Fuente: Mundo-animal

3 de julio de 2012

Cómo elegir una caseta para perro: tamaño y material

Cómo elegir una caseta para perro: tamaño y material

caseta de perro
Cuando compremos una caseta para perro, tenemos que tener muy claro el tamaño que queremos, pensar que es donde nuestro amigo fiel va ha pasar muchisimo tiempo, por lo tanto el tamaño es lo mas importante.
Elegir el tamaño de la caseta para mi perro
Puedes pensar que es una tontería lo del tamaño, pero en función de la raza del perro y el carácter que tenga el perro.
En ocasiones podremos ver perros que pasan más tiempo fuera que dentro de la caseta, así que a la hora de elegir el tamaño de la caseta no sólo tendremos en cuenta la raza sinó también el carácter.
En cuanto al tamaño del perro, no sólo tenemos que pensar que el perro tiene que caber de pie, sinó que también tiene que caber estirado y poder tener una postura cómoda, muchas veces elegir un tamaño superior de caseta al que le corresponde a tu perro según las tablas puede ser la clave entre tener una caseta y que sea utilizada. Para darte cuenta de ello, piensa que eres el perro y que no sólo tienes que entrar, sinó que también tienes que dormir cada día.
La postura de un perro cuando duerme suele ser totalmente estirado o en forma de semicírculo, esto ya nos da una primera pista sobre el tamaño interior de la caseta.
Otros factores a tener en cuenta
Por orden de importancia, de más a menos podríamos listar los siguientes :
Material de la caseta para el perro
Desde mundo animal siempre aconsejaremos casetas para perros que no sean porosas, este punto es muy importante, no hay que pensar únicamente en la higiene de la caseta sinó también olores y posibilidad de que quede infestada de parásitos.
En este apartado podremos elegir casetas para perros de plástico o de resina y las casetas de madera.
Hoy en dia las resinas son muy aconsejables por su dureza y porque nos aislaran bastante del frio y del calor, otra de las ventajas es, que en la intemperie no variaran de color por los efectos solares.
Las casetas para perros de madera, pueden ser interesantes aunque el precio muchas veces condiciona la compra. Estas casetas para perros, suelen obtener una puntuación muy alta en cuanto a aislamiento térmico.

1 de julio de 2012

Cómo ayudar a tu perro a pasar el calor del verano

dog sun bath Cómo ayudar a tu perro a pasar el calor del verano

Con este artículo os vamos a dar unos consejos de como mitigar los efectos de calor en tu perro, ya que las altas temperaturas y dejar a tu perro expuesto durante horas al sol pueden afectar su estádo de ánimo e incluso puede llegar a ser muy peligroso para su salud. Con estos consejos podemos hacer que tu perro pase un buen verano sin problemas de deshidratación.
Cada raza de perro tiene una capacidad diferente al calor, y se adaptan de diferente forma al periodo estival.
Sobretodo, recordad que los perros en ocasiones no regulan bien la temperatura, por lo que hay que tener especial cuidado.

Corte de pelo

Al igual que a nosotros, si nuestro perro tiene el pelo muy largo, es un buen momento para cortarle el pelo, por supuesto siempre que sea un perro al que su pelo se lo permita, ya que hay razas a las que no se les corta el pelo. Si tienes alguna duda, consulta con tu veterinario para estar seguro que es una buena opción.

La deshidratación del perro y su alimentación

La deshidratación es uno de los mayores peligros que puede pasar nuestro perro durante el verano, para ello conviene regular las horas de exposición del animal al sol, si tienes tu perro en el jardín o en una terraza, conviene dejarle una sombrilla o tener preparado un espacio donde tenga sombra durante todo el día, para evitar una subida de su temperatura corporal.
Tenemos que dejar el bebedero lleno de agua y asegurarnos que en nuestra ausencia no le va a faltar agua, así como intentar que sea fresca, por lo que deberemos ponerle el bebedero en la zona de sombra. Este punto es esencial.
Respecto a las comidas, con el calor, los perros bajan su apetito, por lo que es recomendable acostumbrarlos a comer en las horas menos calurosas del día e intentar complementar su alimentación con pienso húmedo como complemento para su hidratación.
Hay que prestar especial atención y cuidado si nuestro perro sufre de vómitos o tiene diarrea porque la hidratación deberá ser mayor, en este caso te aconsejamos acudir a tu veterinario.

El paseo

Hay que evitar salir a pasear con tu perro en las horas más calurosas, y debemos evitar tener un juego con mucho ejercicio. Se recomienda llevar un recipiente con agua durante el paseo, sobretodo en las zonas donde se alcanza mayor temperatura de la península.

El coche

Si acostumbramos a desplazarnos con el perro en coche, es conveniente dejar la ventana abierta durante el trayecto, pero al llegar a destino, hay que sacarlo rápidamente del coche, ya que dejar una ventana abierta no sirve de nada, lo importante no es tanto la ventilación como la temperatura dentro del vehículo.

Perros con problemas respiratorios

Aquellas razas de perros que suelen tener problemas respiratorios como el Bulldog o el Pequinés entre otros, o problemas cardíacos, hay que prestarle especial atención.

Agua fria

Uno de los mejores remedios para mitigar el calor de tu perro, al igual que a nosotros, es recibir un baño de agua, o dejar que nos moje el agua de una manguera, es un remedio tan simple como antiguo pero quizás uno de los más eficaces y agradecidos del verano, con ello hacemos que baje la temperatura corporal y estaremos cuidado de su salud. Si dispones de jardín, puedes mojarlo un poco para que exista un ambiente fresco.

Fuente:mundo-animal.